El argentino trabajó durante la noche del viernes para mejorar el ritmo a una vuelta lanzada en Montreal y se puso cerca de su compañero, aunque Alpine está lejos de los tiempos de punta. gf6p
El viernes de Franco Colapinto fue preocupante cada vez que intentó dar una vuelta rápida al trazado de Montreal, donde se disputa el GP de Canadá, décima fecha de la F1. Lejos, desconectado, con un Alpine indócil y en una situación en la que ni el mismo piloto argentino encontraba respuestas. En ritmo de carrera estaba en los tiempos lógicos para el nivel de su A525, pero a un giro estaba casi en otra categoría, último y a siete décimas del penúltimo. El bonaerense anticipaba una larga noche de viernes para trabajar con el equipo para tratar de entender los motivos de tanta distancia. Y la labor tuvo resultados en la tercera práctica disputada este sábado.
El piloto argentino 27 giros con el Alpine, todas con la cubierta blanda, la que se utiliza para buscar ese giro lanzado que marque el mejor tiempo posible, clave en la clasificación. Y su evolución fue clara. El viernes había conseguido 1m13s898 como mejor registro y en la última sesión lo mejor ostensiblemente al clavar el reloj en 1m13s060 para finalizar 17º, a 1s261 de Lando Norris, el más veloz. La distancia con la punta es enorme en una pista de 71 segundos y fracción, pero lógica para el nivel del equipo de Enstone en comparación con los de punta.
La mejora sustancial fue con respecto a su compañero Pierre Gasly. Después de haber quedado a una luz de 1s024 del francés tras la primera jornada, este sábado se redujo a 376 milésimas. Es cierto, el francés no pudo aprovechar el mejor momento del último juego de neumáticos blandos nuevos, cuando todos salieron a buscar la marca, porque se encontró con tráfico. De hecho, se quejó por radio de la situación. Recién pudo cerrar una vuelta rápida después de un puñado de giros consumiendo el punto ideal de la cubierta. El francés quedó 12º, a 885 milésimas de Norris, y mejoró apenas 200 milésimas con respecto a lo realizado el viernes.
Por lo visto en entrenamientos, Colapinto no la tendrá fácil para meterse en la Q2 durante la clasificación que se desarrollará este sábado. Las sensaciones del argentino después de un viernes olvidable en la búsqueda de un giro veloz, mejoraron sin dudas. En la próxima salida, esa curva de crecimiento deberá continuar para tratar de lograr el mejor cajón de partida posible para la carrea del domingo.
Por lo visto en entrenamientos, Colapinto no la tendrá fácil para meterse en la Q2 durante la clasificación que se desarrollará este sábado. Las sensaciones del argentino después de un viernes olvidable en la búsqueda de un giro veloz, mejoraron sin dudas. En la próxima salida, esa curva de crecimiento deberá continuar para tratar de lograr el mejor cajón de partida posible para la carrea del domingo. Y, claro, evitar esa amenaza que se llama Muro de los Campeones, de donde quedó a nada de golpearse en el tercer ensayo. Y del que no zafaron Oscar Piastri, Nico Hülkenberg y Oliver Bearman.